La presidenta de la Federación de Juntas Vecinales de El Alto (Fejuve), Fanny Nina, retomó ayer la sede de esta entidad con el apoyo de vecinos de base de los distritos 8 y 1, y convocó a sus opositores a solucionar los problemas internos en el marco del diálogo.
Nina fue suspendida de su cargo por la directiva de la Fejuve a instancias del vicepresidente Claudio Luna y de dirigentes de los distritos 1, 5 y 8, que la remitieron al Tribunal de Honor por supuestas infracciones al estatuto interno.
“Ella generó la división y asumió decisiones unilaterales sin consensuar con las bases y el directorio”, aseveró Luna. Añadió que hoy exigirá que Nina devuelva los ambientes de la Fejuve y que se someta al proceso interno.
La presidenta alega que su suspensión es ilegal, porque previamente no se le hizo ni una llamada de atención y no se presentaron pruebas en su contra, tal como señalan los estatutos. “Las diferencias surgen por el pliego petitorio presentado al Gobierno”, apuntó.
La Razón
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